Ana Torres Menarguez
El País, 30/09/2014
En España no existe ninguna guía para identificar una universidad de calidad. Cuando un estudiante quiere escoger un centro para matricularse, tiene que conformarse con el asesoramiento de algún conocido, con el prestigio que se transmite boca a boca o con su propia intuición. A día de hoy, la única herramienta que mide la excelencia de las universidades en su totalidad son rankings internacionales como el de Shanghái –elaborado por la Universidad Jiao Tong– o el The Times Higher Education –del diario británicoThe Times–, que publican anualmente el top 500 y 200 de las mejores universidades mundiales.
Estos rankings usan como principal criterio para la clasificación el impacto investigador de los campus y los premios Nobel concedidos a sus profesores y alumnos, méritos que dejan en mala posición a las universidades españolas. Aunque no a todas; la Universidad de Barcelona (UB) está entre las 200 mejores del mundo según el Ranking de Shanghái 2014.