Rafael Rangel Aldao
24/11/2018
Venezuela vive momentos históricos, turbulentos, con exigencias extremas
a la aplicación de conocimientos, científicos, tecnológicos y
gerenciales, teóricos y prácticos, que ayuden a generar soluciones a
tanta calamidad. De allí que sea necesario adoptar dinamismos inéditos y
audaces a una labor analítica y creativa que en nuestros países ocurre
en medio del sosiego y una tradicional rigidez que a veces se confunde
con rigurosidad. A través de todo el siglo pasado nuestras instituciones
académicas pudieron surgir sin grandes sobresaltos, sin embargo, con
ello el país se fue aislando de los grandes cambios tecno-científicos de
la cuarta revolución industrial, hasta desembocar en la situación en
que nos hallamos ahora.