viernes, 11 de marzo de 2016

La universidad postchavista

Mariano Nava Contreras
11/03/2016

En el año 2003 era yo consejero de la Facultad de Humanidades de la Universidad de Los Andes. Recuerdo que un día llegó uno de mis compañeros con un proyecto bajo el brazo: abrir un centro de comunicaciones en la Facultad. Entusiasmado, mi colega explicó que se aprovecharía uno de los espacios libres para abrir un centro de llamadas que además tuviera internet, computadoras, fotocopiadoras, impresoras y todo lo que pudiéramos necesitar estudiantes y profesores. Ya todos los estudios de factibilidad estaban hechos. El alquiler del local, además, reportaría buenas entradas a las cuentas de la Facultad, las cuales se podrían reinvertir en computadoras y materiales de oficina que tanto hacían falta. Cuando nuestro colega terminó se inició el turno de preguntas. La primera interrogante no se hizo esperar: ¿de dónde saldría el dinero para desarrollar el proyecto? Mi colega respondió de forma lógica y natural: habría que convocar, claro, una licitación. De inmediato se levantó el clamor indignado, especialmente entre los consejeros más viejos: ¡Queeeé! ¿Abrir nuestra Universidad a los negocios de la burguesía? ¿Privatizar el sagrado recinto de la Academia? ¿Permitir que sea tomado por las putrefactas garras del capitalismo? ¡Jamássss! Y hasta ahí llegó el proyecto.

jueves, 10 de marzo de 2016

La universidad en la calle


Luis Porter
México, 06/03/2016


El sentido de la universidad como lugar físico es que en su recinto las ideas se constituyan como proyectos académicos; la actividad individual sea comunicada en conversaciones constantes entre colegas y en una armoniosa y respetuosa relación con el docente; que existan cuerpos académicos que vayan más allá de la formalidad de la adscripción y el membrete. Nada de esto ocurre. En lugar de la armonía prevalece un ambiente de pasiva conflagración. No hay proyecto, no hay metas y la amplia variedad de opiniones en cuanto a la organización y sus estrategias, han sido sustituidas por rituales burocráticos, convocatorias a elecciones donde nadie representa a nadie, comités que imponen reglamentos, y una carencia total de imaginación, de ideas y para qué mencionar al humor. La rutina cotidiana se arma con una serie de obstáculos que impiden imaginar cualquier cambio que requiera acción organizada. El mejor símbolo de la universidad actual es el aula con pizarrón y sus sillas alineadas, una presencia obsoleta. En pocas palabras, es difícil encontrar en las instituciones universitarias actuales las condiciones necesarias para impulsar cambios. Con esta descorazonada realidad en la mente y el corazón, en las últimas, aunque ya demasiadas semanas, ha existido una escalada de amenazas de bomba que ha puesto a la UAM Xochimilco, en vilo. La prensa calla, las autoridades callan, hay una estrategia de negación evasiva que lleva a que parte de la comunidad reaccione desconcertada y otra haga de sus miedos un murmullo alimentado por hipótesis fantásticas.

Anomia universitaria

Ángel Lombardi
Tal Cual, 10/03/2016

En el ámbito de la sociología se denomina anomia (del griego ?νομ?α / anomía: prefijo ?- a- «ausencia de» y ν?μος / nómos «ley, orden, estructura») a la falta de normas o incapacidad de la estructura social de proveer a ciertos individuos de lo necesario para lograr las metas de la sociedad”.

Ley de Universidades: “Artículo 2. Las Universidades son Instituciones al servicio de la Nación y a ellas corresponde colaborar en la orientación de la vida del país mediante su contribución doctrinaria en el esclarecimiento de los problemas nacionales”.

domingo, 6 de marzo de 2016

Carta de Orlando Albornoz a Pablo Gentili, Secretario Ejecutivo de CLACSO

Caracas 6 de marzo de
Dr. Pablo Gentili
CLACSO / Secretario Ejecutivo

Saludos Pablo. He leído con interés la defensa pro domo sua que haces del antiguo presidente de Brasil, Lula Da Silva, de fecha ​04 de marzo de 2016 (​http://www.clacso.org.ar/difusion/mensaje_2016_2.php) Escribes señalando que “Lo hago convencido de mi deber como responsable de una de las mayores redes académicas del mundo”

Ciertamente la detención de Lula tiene el componente de un show, típica estrategia destinada a desacreditar, más que a hacer justicia, ante un supuesto delito. Pero Lula es noticia y la misma le dará la vuelta al mundo, despertando el morbo de quienes creen que los políticos son ladrones de oficio.

Pedagogía de la Comunicación

Gustavo Hernández Díaz
El Nacional, 06/03/2016

Mario Kaplún es, sin lugar a dudas, uno de los intelectuales más prominentes de la Educación Mediática en América Latina. Su pedagogía es una referencia obligada en el ámbito académico internacional. Reflexiona sobre las modernas teorías del aprendizaje y su aplicabilidad en la lectura crítica de los medios. Ha seguido estos enfoques: la semiótica de Ferdinand de Saussure y de Charles Sanders Peirce, el Emirec de Jean Cloutier, el constructivismo de Lev Vygotski, Jerome Bruner, David Ausubel y la educación crítica de Paulo Freire y Célestin Freinet. Algunos de sus trabajos más importantes son: El método del casete-foro (1984), El comunicador popular (1985), La educación para los medios en la formación del comunicador social (1987), A la educación por la comunicación (1992), Continuidades y rupturas en las búsquedas de un comunicador-educador (1995), Una pedagogía de la Comunicación (1998). Este insigne educador fallece en noviembre de 1998. Su legado intelectual ha dejado una huella perdurable en la educación y la comunicación.

sábado, 5 de marzo de 2016

Universidades ahorcadas

Editorial, 05/03/2016

Pareciera que, en medio de tantas crisis que han estallado al unísono a lo largo del país, resultara por demás excesivo insistir en el tema presupuestario de las universidades, pero en medio de esta debacle moral y de robo estandarizado que ha impuesto el chavismo madurismo, no hay lugar para indecisión alguna pues se trata de un asunto no sólo grave sino escandaloso.

Aunque en la Venezuela actual no hay problema que no lo sea, lo cierto es que esta suerte de ahorcamiento en cámara lenta que Nicolás Maduro le está aplicando a las universidades autónomas y democráticas no tiene otro fin que esclavizarla. Si ello llegara a ocurrir, entonces la escasez de neuronas que hoy está enterrando a la improvisada revolución chavista se extendería a lo largo de las aulas universitarias y terminaría obligando a los jóvenes a gritar “¡Todos somos Maduro!” Tan espantoso futuro debe ser detenido ya si se quiere salvar a Venezuela.

viernes, 4 de marzo de 2016

La Universidad rebelde

Mariano Nava Contreras
El Universal, 04/03/2016

El lunes pasado tuvo lugar en la Universidad de Los Andes un acto muy especial. Ese día se instaló la segunda cohorte del Doctorado en Estudios Políticos y la número 38 de la Maestría en Ciencias Políticas. El acto, con la solemnidad del caso, contó con la presencia de los principales promotores de este proyecto, doctores Wladimir Pérez y Vladimir Aguilar, pero también de otros importantes profesores e investigadores de esa Facultad. Asimismo se dio la bienvenida a un grupo de profesores de diversas universidades ecuatorianas que ese día comenzaban sus estudios doctorales en la ULA. Mención aparte merece la conferencia del presidente de la Academia Venezolana de Ciencias Políticas y Sociales, Dr. Eugenio Hernández-Bretón, invitado para la ocasión, quien disertó sobre la trayectoria de esta academia desde sus inicios, hace poco más de un siglo, hasta los tiempos actuales. En su intervención, el Dr. Hernández-Bretón destacó el largo y difícil camino que hemos tenido que recorrer los venezolanos para preservar la legalidad y la institucionalidad, a pesar de los abusos del poder y el autoritarismo de muchos de nuestros gobiernos. La trayectoria de los cien años de esta corporación se abre como un arco que empieza en el gobierno de Gómez y termina con este que tenemos ahora. Dos momentos especialmente difíciles, quién lo duda, en la no por breve menos tormentosa historia política de Venezuela.

jueves, 3 de marzo de 2016

No es mejor profesor el que más suspende

Carmen Sánchez Silva
El País, 03/03/2016

Existe una norma invisible que dice que el mejor profesor es el que más suspende. Y nada más lejos de la realidad. ¿Podríamos imaginar que el mejor médico fuese el que más pacientes llevase a la tumba? Es una reflexión de la profesora de la Universidad Complutense María Acaso, que define al buen maestro como aquel intelectual que es capaz de transformar la Universidad a través de la creación de conocimiento crítico. Sin embargo, lo que se ve actualmente en la Academia, se queja, “no es a intelectuales. Porque no se investiga más que para conseguir ascensos”. En opinión de la también coordinadora de la Escuela de Educación Disruptiva de Telefónica, este problema se corregiría impidiendo que los profesores trabajen en la misma Facultad en la que han cursado su doctorado, eligiendo a los docentes realmente por su currículo y evaluando su labor. Es decir, rompiendo la endogamia de la Universidad.